Tratas de olvidar
y no hay olvido.
Sólo el esfuerzo
puesto
en parir la dicha,
es lo que late
sobre la dicha
muerta.
Y la dicha, muerta a
los pies,
se fue por causas
ajenas
a tanto ardor,
a tanto celo.
Y así, muerta la
dicha,
solo sientes
que tú también te
mueres...
de a poquito.
Publicado en mi libro "De sentires y sentires". 2008
Es un poema universal, el que intenta olvidar. Lo necesito ahora.
ResponderBorrarFelicidades Justino
ME ALEGRA TU PRESENCIA Y COMENTARIO
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