Con
gratitud
A Beba y Bebe Cámpora.
Sólo sombras de
cactus
me amparaban
en un entorno
hostil.
Y sumergida en mis
párpados
estaba una lágrima
empañando un ir y venir de olvidos.
En días de insolente
sol
y en noches de lunas
frías,
esperaba ver
aparecer el gesto amigo
que abriera una
senda hacia la casa
para no deambular ya
y entrar en ella
gozoso.
Y me cobijaron
singularmente,
haciéndome más parte
de sus vidas.
En sus brazos
abiertos mi alma se remansa
y encuentra un lugar
en donde el viento
al tocar mi piel...
me incita a volar...
sin vivir pensando
en mis ayeres.
Publicado en mi libro "De Sentires y sentires". 2008
Publicado en mi libro "De Sentires y sentires". 2008
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