Es de noche y el silencio se esparce.
Está dormida la
ciudad y no me siente
ni siento a la ciudad y sus rumores;
sólo en el tic tac
del reloj hallo patente
la realidad nocturna.
Y en esta
insistencia de la noche
por ser noche
silenciosa y quieta,
se duerme el alma y
despierta la nostalgia
que te busca entre
fanales verdes.
Si me rondaras esta
noche,
si esta noche te
acercaras a mi lado
y no te fueras por
un rato,
despertaría la
ciudad adormecida
y quedaría despierta
hasta que vuelvas.
Publicado en mi libro "De sentires y sentires". 2008
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